Morelia, Michoacán, 22 de julio de 2024.- Así como hay plantas que no soportan los sitios húmedos y con poca luz directa, hay otras variedades que prefieren no estar expuestas a los rayos solares directos y adoran el vapor, por lo que les sientan muy bien los espacios con estas condiciones ambientales. Tal es el caso del baño, un área de la casa que puede ser difícil de decorar con vegetación debido a la alta humedad que suele concentrarse.
Si quieres decorar tu baño con algunas especies y llenar de vida este lugar, hay tres pequeños arbustos que puedes cultivar sin ningún tipo de problema. Si no se las deja crecer de manera excesiva, estas plantas pueden quedarse pequeñas, por lo que no ocuparán mucho espacio. Asimismo, son fáciles de cuidar y mantener. Y lo más importante de todo, no pasarán desapercibidas gracias a la vistosidad y belleza de sus hojas verdes.
Las tres plantas ideales para adornar tu baño son el conocido y popular potus, el resistente y fuerte syngonium, y el philodendron peruviano. A continuación, descubrí cómo cuidar estos arbustos trepadores y los factores que hay que tener en cuenta para que crezcan y se desarrollen de manera correcta.
Tres plantas perfectas para el baño
Potus: es una especie de la familia Araceae nativa del sudeste asiático (Malasia, Indonesia) y Nueva Guinea. Es una liana que puede alcanzar 20 m de alto, con tallos de hasta 4 cm de diámetro. Trepa mediante raíces aéreas que se enganchan a las ramas de los árboles. Esta planta de interior requiere de luz indirecta, ya que la exposición directa al sol puede quemar sus hojas. Regar solo cuando el sustrato esté seco y evitar los encharcamientos (no debe confundirse humedad con exceso de agua en el sustrato). Si tu hogar es muy seco, se puede pulverizar agua sobre sus hojas y tallos, sin sobrepasarse. El lugar de cultivo debe contar con buen drenaje y un sustrato rico en nutrientes, ligero y aireado.
Syngonium: es un género con 60 especies de plantas con flores de la familia Araceae. Es originario de México y América tropical. Son cepas leñosas de crecimiento que alcanza alturas de 10-20 metros o más en los árboles. Esta planta trepadora o rastrera puede crecer en sitios pocos iluminados, pero lo mejor es que reciba buena luz indirecta. Sus raíces no toleran encharcamientos, por lo que el riego debe ser moderado. Necesita una buena dosis de humedad. El sustrato debe ser ligero y poroso para facilitar el correcto drenaje del agua. Cuando el ambiente esté muy seco, pulverizar las hojas.
Philodendron peruviano: es un gran género de plantas fanerógamas, de la familia de los arum (Araceae). Se cultivan como plantas ornamentales y de interior. Muchas especies son capaces de trepar sobre otras plantas o de subir los troncos de árboles con la ayuda de raíces aéreas. Un dato llamativo de esta vegetación es que, al principio, sus hojas nacen enteras y al madurar, aparecen sus característicos agujeros. Este fenómeno se denomina fenestración.
El philodendron prefiere un espacio bien iluminado, pero sin exposición al sol directo. Se recomienda pulverizar sus hojas a diario (sobre todo en verano) para mantenerlas húmedas. El riego debe ser moderado, no tolera el exceso de agua. Requiere de un sustrato rico en nutrientes y con buen drenaje que airee sus raíces. (CON INFORMACIÓN DE: MINUTO NQN)