Morelia, Michoacán, 22 de agosto de 2024.- La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) se pronunciaron porque las marcas chinas que llevan más de un año de operación en nuestro país -como lo es BYD o SEV- “transparenten” su información de ventas realizadas en México, informen a la autoridad y ejerzan las buenas prácticas de competencia en el mercado mexicano.
Existe una desviación en términos de transparencia de calidad de la información, por ello, la importancia de que todos los competidores en el mercado mexicano hagan un compromiso con la transparencia y buenas prácticas de competencia, para que de inmediato reporten al Inegi”, pugnó Guillermo Rosales, presidente de la AMDA.
Precisó que el reporte al registro administrativo de la Industria automotriz del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) es voluntario, sin embargo, es importante que accedan a este como una muestra de compromiso con la sana competencia económica.
Incluso, ante el desconocimiento de las razones, por las cuales no reportan ventas, Odracir Barquera, director general de la AMIA, adelantó que ya se solicitó a la presidenta electa Claudia Sheinbaum que implemente un mecanismo que obligue a todos los participantes a transparentar la información.
Explicó que la industria automotriz se ha convertido en un referente medible de la economía mexicana, por lo que urge que se cuenten con todos los datos para tener un panorama completo de todas las marcas participantes.
“Es indispensable que todos los jugadores en el mercado reporten sus datos y es fundamental para conocer el comportamiento completo del mercado y dar transparencia sobre las ventas vehiculares”, expuso el líder del organismo privado que representa a las automotrices que operan en México.
La AMIA trabaja de la mano con el Inegi y su reporte de ventas “se ha vuelto uno de los más oportunos de la economía y es importante que los jugadores tengan su información”, precisó Odracir Barquera.
De acuerdo con la AMDA y la AMIA, basados en el Inegi, sólo las marcas chinas como lo es MG, Chirey-Omoda, Motornation, Great Wall Motors y JAC reportan sus ventas e importaciones de vehículos. Y estas empresas automotrices representan el 8.8% de las ventas totales del mercado mexicano.
No obstante, hay un número importante de marcas chinas de reciente llegada al país que no presentan su información al Inegi, lo cual supone la existencia de huecos en la información.
Oleada de marcas
Desde el 2022 se aceleró la ola de llegada de marcas chinas de vehículos ligeros al mercado mexicano, con la fuerte expectativa de tener una fuerte presencia en México y aprovechar su red de tratados comerciales para exportar, principalmente a Latinoamérica y en un futuro sería a Estados Unidos.
Si bien hace dos años había siete marcas originarias del gigante asiático en México, ahora se han sumado al menos 10 más de ellas, y otras tantas de camiones pesados.
BYD ha presentado al menos ocho diferentes modelos de autos (a combustión y eléctricos) en México y cuenta con una alianza con Liverpool para comercializar sus unidades. No obstante, ni la automotriz ni la tienda departamental han reportado el número de vehículos vendidos a lo largo de casi dos años de presencia en el país.
Geely informó que cuenta con 50 puntos de venta a nivel nacional y pretende cerrar con 75 agencias, de modo, que “es probable que al cumplir su primer año de operaciones en México reporte el número de autos vendidos”.
Resaltó que el compromiso con México es de gran relevancia, tan es así que Zeekr, su marca de lujo, también comenzó su venta.
SEV es otra de las automotrices que no han reportado sus ventas al Inegi, aunque trabaja con el organismo de reciente creación Electro Movilidad Asociación (EMA), para reportar la comercialización de los autos eléctricos.
Para los organismos privados, el transparentar los números de ventas de autos ayudará a los consumidores a perfilar su elección de compra por un auto nuevo, así como ayudar a que la competencia china cumple con las regulaciones y es transparente.
(CON INFORMACIÓN DE: EL ECONOMISTA)