Irrumpieron en la madrugada para terminar su crimen.
La madrugada de este lunes 4 de noviembre, un violento ataque en el hospital regional Gonzalo Río Arronte, en Atlixco, Puebla, resultó en la muerte de dos policías municipales y un paciente que estaba siendo atendido. El incidente tuvo lugar alrededor de las 4:00 a.m., cuando un grupo armado irrumpió en el nosocomio, ubicado en la carretera federal Atlixco-Izúcar de Matamoros.
Los atacantes ingresaron al hospital con el aparente objetivo de asesinar a un paciente que había sido internado un día antes debido a heridas de bala. Durante el ataque, se desató un enfrentamiento con dos policías municipales que estaban en el lugar. Ambos agentes resultaron heridos de gravedad y, pese a los intentos por salvarlos, fallecieron poco después. El Ayuntamiento de Atlixco lamentó su pérdida, expresando que «desafortunadamente los elementos de seguridad pública fallecieron en el cumplimiento de su deber».
El secretario de Seguridad Pública de Puebla, Daniel Iván Cruz, detalló que el paciente asesinado había llegado al hospital el día anterior, luego de sufrir un ataque armado en una casa de descanso en Atlixco, donde se encontraba en compañía de otras personas. Tras recibir reportes de disparos en la zona, la policía localizó vehículos con impactos de bala y manchas de sangre, aunque en ese momento no se hallaron personas lesionadas en el lugar. Más tarde, los familiares trasladaron al herido al hospital, donde finalmente fue ejecutado.
A pesar de que se desplegó un operativo de seguridad en la zona tras el ataque, hasta el momento no se han realizado detenciones ni se ha identificado a los responsables, quienes presuntamente huyeron a bordo de varias camionetas y un vehículo tipo sedán.
La Fiscalía General del Estado de Puebla ha asumido la investigación para esclarecer los motivos detrás de este violento ataque y dar con los responsables. Este incidente ha dejado consternada a la comunidad de Atlixco y subraya la creciente preocupación por la seguridad en el estado, así como la vulnerabilidad de las instituciones médicas ante situaciones de violencia.
Fuente: INFOBAE