El gobernador del estado dio a conocer que si se devuelven los vehículos, no habrá represalias.
Redacción / La Voz de Michoacán
Morelia, Michoacán. El gobernador del Estado, Alfredo Ramírez Bedolla, confirmó este lunes una investigación por camionetas que el exgobernador Silvano Aureoles Conejo habría donado a la Arquidiócesis de Morelia en acuerdo con el arzobispo Carlos Garfias Merlos, y pide que las regresen para que no haya represalias.
Durante el encuentro con medios de comunicación en casa Michoacán, el mandatario estatal detalló que esas camionetas RAM doble cabina son utilizadas normalmente por el gobierno para la Guardia Civil o para el sector salud.
“Se está haciendo la investigación, hay un desvío de recursos públicos, fueron compradas para cierto fin y están usándose para otra cosa”, manifestó el titular del Ejecutivo estatal.
Dio a conocer que se está rastreando esta situación, que está siendo investigada por la Contraloría del Estado; asimismo, sostuvo que no se trata de una persecución en torno a la Iglesia Católica, pero hizo a un llamado a quien traiga una camioneta de esas, que la devuelva.
“Yo haría un llamado, porque no se trata de una persecución en torno a la Iglesia Católica, si algún sacerdote, si alguna persona trae una camioneta de éstas, que la devuelva, que la entregue personalmente, porque seguramente las tomaron de buena fe. Si el señor arzobispo te da las llaves de una camioneta, no creo que andes preguntando, tú de buena fe agradeces y la usas. Ellos no están enterados del acuerdo, de la negociación que hizo el arzobispo con el gobernador, para nada”.
PINTA SU RAYA CON EL ARZOBISPO
Alfredo Ramírez Bedolla enfatizó que él desde un principio “pintó raya” en el tema clerical, con el arzobispo Carlos Garfias Merlos; “así estoy más tranquilo”, dijo.
Y a quien manifestó sus respetos fue al papa Francisco, de quien consideró que “es de barrio, allá en Argentina andaba en los barrios pobres, ese sí con todo”, además de desear que se recupere de buena salud.
Insistió en que no es un tema dirigido (persecución) y que quienes estén usando las camionetas que las devuelvan “ya para que se aclare la situación”.
“También, cuando se actúa de buena fe, aquí está la camioneta, no hay ningún problema, también hay una consideración en el sentido de que hay inocencia porque no se sabía de dónde venía ese vehículo, no habrá ninguna represalia, al contrario, en el caso de camioneta por camioneta, vamos cerrando la carpeta”.
Pero advirtió que quien fue el responsable el tema tendrá que responder al más alto nivel. Finalmente refirió a las “tendencias políticas que el arzobispo tuvo en campaña con Silvano en Zitácuaro en 2024. Ni modo, perdieron 2 a 1, pero no implica que todos los sacerdotes sean así”.