•Tras varios años en donde ciudadanos argumentan condiciones de seguridad en este espacio, persiste la percepción de inseguridad en esta plaza.
Morelia, Michoacán; a 20 de agosto de 2025.-Tras varios años de ser rehén de vagabundos, quienes circundaban la plaza Carrillo de Morelia, en la actualidad ciudadanos de la capital michoacana aseguran que en la actualidad persiste la inseguridad en esta plaza, en donde de forma particular mencionan que por la noche evitan esta zona de la ciudad.
De acuerdo con los transeúntes, en este espacio hay poca o nula seguridad durante la noche y el transcurso de la tarde, y pese a la actividad de baile por la noche para reactivar la activación social en este espacio, no se ha podido evitar dejar solo este espacio, pero de forma regular se puede observar que es una plaza con poca afluencia de visitantes, debido a la extensa fama que rodea a esta plaza, que si bien tiene su toque histórico, es más abordada por temas de seguridad.
“Pues a esta hora si, pero tal vez en la noche he pasado y ya no lo creo que sea tan segura, y pues he pasado muchas veces caminando, no vivo tan lejos de aquí y si he pasado varias veces, y creo que muchas veces lo que se ocupa es como mucha participación de la gente con este tipo de talleres o actividades en esta zona, pero sí creo que hace más falta de presencia de niños o juventudes”.
En este tenor la mayoría de los ciudadanos argumentaron que hace más falta de reactivación con diversas actividades que se puedan dar en este punto en especifico de la ciudad, ya que como también es bien sabido, es una plaza que conecta con muchas rutas del servicio de transporte público, lo cual la hace una plaza concurrida al tener la afluencia de personas para tomar alguna diversa ruta de transporte.
“Pues es que en todo Morelia está mal, no nadamas aquí, y hace falta que se ponga al tiro aquí el gobierno y que en todos lados se pongan pilas”.
Finalmente cabe destacar que durante años esta plaza ha venido arrastrando inseguridad e inclusive asaltos, en donde la noche se convierte en un factor crítico para este espacio público, en donde propios locatarios cierran pronto sus locales debido a que después de las ocho de la noche, argumentan, se queda solo este espacio.