Morelia, Michoacán a 1 de septiembre.- Cuidar a un adulto mayor puede llegar a ser un trabajo complicado, siendo personas que necesitan mucha paciencia y amor.
Enfermeras y auxiliares del instituto Vive acuden cada ocho días al “Hogar del Cristo Abandonado”, en Morelia, para apoyar al cuidado de los 45 adultos mayores que ahí residen, cambiando su ropa, pañales, ayudando a su aseo personal y conviviendo con ellos.
Nancy González, señaló que puede llegar a ser una tarea algo difícil por la forma en que llegan a comportarse, sin embargo, ha llegado a comprenderlos y a quererlos.
“Yo nunca me había imaginado, es una tarea muy difícil porque no sabes como tratarlos; para mí es algo muy lindo, pero a la vez algo muy triste porque son personas que no tiene familia, entonces lo que ellos necesitan es mucho cariño. Ves mucha tristeza en ellos porque realmente no tienen a alguien que los visite y cuando tú te acercas a ellos, ellos también te quieren dar amor y la verdad se va uno con un nudo en la garganta porque no quisieras dejarlo, peor me voy con satisfacción porque sé que de alguna manera les sirve lo que uno hace pro ellos”, expresó.
Asimismo, Janet Pérez, otra de las compañeras, dijo que ha sido una experiencia muy agradable, platicar con algunos de ellos y tratar de hacer que pasen de la mejor manera su estancia en el asilo.
“No tan difícil porque ellos a pesar de que no se pueden ni mover tratan de ayudarnos como pacientes, cuando uno lo va a amover o cambiar, ellos hacen el intento de moverse para un lado a otro (…) es una experiencia muy bonita la verdad, cuando llegue aquí por primera vez era algo sorprendente porque nunca me imagine que me tocaría ver o hacer lo que me toca aquí”, dijo.
Las enfermeras comentaron que su principal motivación es poder ofrecer cariño y comprensión a personas que muchas veces no tiene con quien hablar ni expresar su sentir, además de pensar que todos podrían llegar a esta edad y con las mismas necesidades.