Donald Trump firma una controvertida orden ejecutiva para volver a fomentar el uso de popotes de plástico en Estados Unidos.
Estados Unidos.-El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha promulgado una orden ejecutiva que insta tanto al gobierno como a los consumidores a preferir el uso de los popotes de plástico para beber, marcando un cambio importante frente a las políticas de su antecesor, Joe Biden, que buscaban eliminar los plásticos desechables y abordar la problemática de los residuos.
“Vamos a volver a los popotes de plástico”, afirmó Trump durante la firma en la Casa Blanca, criticando los popotes de papel porque “no funcionan”. Además, mencionó: “No creo que el plástico vaya a afectar mucho a un tiburón mientras come”.
Esta decisión revoca iniciativas previas de la administración Biden, que había propuesto restringir los plásticos desechables no biodegradables, perjudiciales para los ecosistemas y que contaminan las cadenas alimenticias.
La orden de Trump también cancela una política que tenía como objetivo eliminar el uso de todos los productos plásticos desechables en terrenos federales para 2032.
Internacionalmente, diversas naciones han impuesto restricciones sobre ciertos tipos de plásticos de un solo uso. En México, se implementó una regulación en 2020 que limita el uso de popotes de plástico, la cual permanece en vigor. No obstante, con la reciente orden de Trump, se anticipan desafíos importantes para estas políticas.
Las consecuencias de esta nueva legislación son significativas. Se espera un incremento en los residuos plásticos, que podrían ascender a 119 millones de toneladas métricas para 2040, según proyecciones de la OCDE. Asimismo, las empresas que habían adoptado prácticas más sostenibles podrían verse obligadas a retroceder en sus esfuerzos por minimizar el uso de plásticos.
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La orden ha generado un amplio debate y preocupación entre los defensores del medio ambiente, quienes sostienen que los popotes de plástico son una fuente considerable de contaminación oceánica y afectan negativamente a la vida marina. A pesar de esto, Trump defiende su medida, reiterando que los popotes de papel no representan una alternativa efectiva y minimizando el impacto del plástico en la vida marina.
