El gobierno de Estados Unidos intensificó su ofensiva contra el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) al imponer nuevas sanciones por terrorismo contra cinco de sus altos mandos, incluyendo a su líder Rubén Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”. Las medidas fueron anunciadas este martes por el Departamento del Tesoro, en una acción que busca debilitar el poder financiero y operativo de uno de los grupos criminales más violentos y activos del continente.

La decisión, enmarcada en la Orden Ejecutiva 13224, dirigida a combatir organizaciones terroristas internacionales también afecta a figuras clave dentro del cártel, entre ellas Ricardo Ruiz Velasco, acusado de crímenes de alto perfil como el asesinato de la influencer mexicana Valeria Márquez durante una transmisión en vivo, y de estar implicado en el homicidio de una modelo venezolana.

En el comunicado oficial, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, señaló: “El reinado de terror del CJNG en México y su tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos han destruido innumerables vidas inocentes.”

El documento cita casos recientes de extrema violencia como el hallazgo de un supuesto campo de reclutamiento en el rancho Izaguirre, utilizado presuntamente para ejecutar a nuevos integrantes del cártel que desobedecían órdenes. También hace un llamado explícito a atender lo que describe como una “epidemia de feminicidios” en México, destacando la impunidad y el impacto sistemático de la violencia de género, ejemplificada con el caso de Márquez.

Además de El Mencho y Ruiz Velasco, fueron sancionados: Julio Alberto Castillo Rodríguez, Gonzalo Mendoza Gaytán, Audias Flores Silva; todos ellos enfrentan el congelamiento de bienes en territorio estadounidense y la prohibición de realizar cualquier transacción con ciudadanos o instituciones de EE. UU.

Las sanciones emitidas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) implican un bloqueo de bienes en EE. UU. o bajo jurisdicción estadounidense y prohibición total de transacciones financieras con ciudadanos o empresas de EE. UU, además de Inclusión de entidades vinculadas a los sancionados (cuando superen el 50% de propiedad conjunta o individual).

Estas medidas forman parte de una estrategia más amplia que busca frenar el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos y reducir la violencia ligada al narcotráfico que afecta tanto a México como a su vecino del norte.

Las autoridades estadounidenses reiteraron su disposición a utilizar todas las herramientas disponibles para desmantelar redes criminales transnacionales. A medida que aumenta la presión internacional sobre el CJNG, también se refuerza el llamado a México para actuar de manera contundente contra la violencia de género y el crimen organizado que, según el Departamento del Tesoro, “actúa con métodos propios de organizaciones terroristas”.

Fuente: El Universal Online