Shorts México surgió en el 2006 ante la necesidad de crear un espacio de exhibición para el cortometraje, especialmente el nacional que, pese a ser uno de los formatos cinematográficos más premiados en el mundo, no contaba con un escaparate digno y especial.
Viridiana Ferreyra / Colaboradora de La Voz de Michoacán
París, Francia.- En este mundo de sociedad globalizada, nuevas tecnologías y boom de comunicación a un solo click, si bien nos brindan herramientas y ventajas internacionales, estas se suman a una serie de fenómenos sociales, como es la migración; la cual ha existido a lo largo de la historia de la humanidad, pero que conlleva diversas razones de desplazamiento, una de ellas y de la que poco se habla, es aquellos que por relaciones intrapersonales deciden quitar su lugar de origen y aventurarse a los desconocido por amor. Y es justamente eso lo que vemos retratado en el más reciente cortometraje titulado “Esperando el tren” (Wann kommt der zug der mich nach house Bringt), del joven cineasta mexicano Tavo Ruiz que está dentro de la selección oficial del festival ShortsMéxico20, en la categoría de competencia mexicana de ficción.
En entrevista exclusiva para La Voz de Michoacán, Tavo Ruiz habló del por qué quiso abordar este fenómeno en su más reciente cortometraje; “Yo, como muchos otros que afrontan esta realidad, también emigre por mi pareja. Por quince años tuve que construir un hogar en una cultura ajena y tan lejana a mi. Tras un tumultuoso año en nuestra relación, me dí cuenta que si esa persona dejaba de estar ahí, me quedaría varado entre dos tierras sin saber a donde pertenezco. Quise retratar ese sentimiento de pérdida y nostalgia a través de esta historia, que seguramente no es nada más mía, si no de varios en mi comunidad LGBT y latina que han pasado por algo semejante”
Shorts México surgió en el 2006 ante la necesidad de crear un espacio de exhibición para el cortometraje, especialmente el nacional que, pese a ser uno de los formatos cinematográficos más premiados en el mundo, no contaba con un escaparate digno y especial. Desde entonces se ha vuelto un punto de encuentro cinematográfico para todos aquellos dentro y fuera del país amantes de la creación del formato corto y para el público ávido del mismo.
“Agradezco a Shorts México por regalarnos la oportunidad de exhibir nuestro trabajo en competencia y por ser siempre una plataforma tan importante en mi carrera como cineasta. Gracias a la siempre presente audiencia por el inmenso interés de ver cortometrajes. Sigamos haciendo cine” nos comparte Tavo Ruiz, quien además habló de ¿Cómo fue el trabajo de producción y postproducción?
“Para la producción, que fue sumamente independiente, filmamos en Berlín, los costos de todo son elevados, a pesar de no conocer a muchas personas, a los pocos que tengo el gusto de poder llamar colegas en la industria fílmica de Alemania, les pedí el favor y todos bajaron sus sueldos. Esto habla de lo bello que es contar con una comunidad artística y lo importante que es apoyarse mutuamente. Encontrar a los actores ideales fue lo más complicado, porque quería que fueran la esencia de quienes somos yo y mi marido. Y creo que por eso, fui más exigente con la búsqueda de los personajes”.
Tavo Ruiz nos narra que la filmación fue en enero de 2023. él se separó de su pareja por un tiempo y por la similitudes del corto, tuvo miedo de acercarse a la postproducción y terminarlo. Tuvo que pasar todo un año para poder armarse de valor y continuarlo. Y ahora por fin el tener su premiere mundial en Shorts México en la competencia de cortometrajes Mexicanos, lo llena de orgullo. “Me es muy nostálgico el no poder estar ahí, pero agradezco al festival y a la siempre presente audiencia por el interés de ver cortometrajes en México; En resumen, desde el guión al estreno, dos años tomó realizar el cortometraje” afirmó.
En 2022 Tavo Ruiz fue uno de los primeros mexicanos ganadores de La Fabrique Cinema del Institut français que invitó a diez directores durante la 75 edición del Festival de Cannes a desarrollar su 1º o 2º largometraje, acompañados por su productor. En esa edición, fue la primera vez que México tuvo diez directores invitados a Cannes. Siendo Tavo Ruiz y José Pablo Escamilla los primeros mexicanos ganadores y quienes fueron recibidos con gran reconocimiento en la 75 edición del Festival de Cannes, un orgullo para México.
Todos los trabajos hasta ahora abordan el lado LGBT, ¿Piensas que aún falta mucho cine por hacer en este sentido?
“Siempre he dicho que mi trabajo como autor es sobre quien soy y lo que me representa. La mayoría de lo que hago está relacionado a temas LGBT. Cuando comencé mi carrera existía muy poco contenido queer, y me llena de orgullo el saber que eso se ha ampliado de una manera espectacular y soy fiel creyente de que aunque el cine gay sea mainstream o de menos que ya tiene más visibilidad que antes, nunca será suficiente. Porque necesitamos que nuestras historias sigan vigentes, el cambio político hacia nuestras personas puede ser arrebatado de nosotros en un instante como en Estados Unidos. Esa amenaza siempre ha existido para la comunidad y por eso es importante seguir hablando de nuestras historias todo el tiempo”
Por ahora “Esperando el tren” (Wann kommt der zug der mich nach house Bringt) solo será exhibido presencialmente en la Ciudad de México, pero apenas es uno de los festivales, Tavo nos platica; “espero poder traerlo a Morelia y a más parte de la república en lo que resta del año. Al terminar estará disponible junto al resto de mi trabajo en mi canal de www.youtube.com/tavoruiz”.
Finalmente Tavo, quien radica en Alemania nos contó sobre sus nominaciones dentro del Festival de Cine de Morelia, donde agregó que; “ Morelia es un lugar muy importante para mí. Mi primer corto llamado "La Madrina" lo hice cuando tenía 17 años. Y Morelia fue el primer festival que nos invitó a una exhibición. Fue mágico y bello. Muchos años después pude regresar con "Retratos de mi madre" en 2019. Un documental sobre mi madre y el abuso sexual infantil, algo que sufrimos varios, y que me era importante abordar. Esas dos experiencias en Morelia guardan un lugar muy especial, también porque fue la primera vez que mi madre me acompañaba a un festival. Y nos las pasamos de maravilla.