Morelia, Michoacán
A 51 años de la desaparición forzada de cinco integrantes de la familia Guzmán Cruz, la demanda de justicia y memoria permanece plenamente vigente, afirmó el vocero del Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM), Pavel Uliánov Guzmán Macario.
Durante la conmemoración del que se considera el primer caso de desaparición forzada en Michoacán, en el Centro Cultural Clavijero (CCC), detalló que “no hay democracia posible, sin justicia para las personas desaparecidas, una deuda histórica del estado mexicano y un ataque directo a los principios democráticos”.
Y es que, más de medio siglo después de la detención, tortura y desaparición de José de Jesús Guzmán Jiménez y sus hijos Amafer, Armando, Solón Adenauer y Venustiano Guzmán Cruz, en México se reportan a julio de 2025 130 mil 174 personas desaparecidas.
De este universo, seis mil 951 corresponden a Michoacán, además de 70 casos a partir de 1974 que involucran a autoridades, comuneros y luchadores sociales indígenas que han sido desaparecidos o ejecutados de manera extrajudicial por defender el territorio, los derechos colectivos o por su lucha social.
En esa situación, indicó Guzmán Macario, el reclamo es la creación por parte del gobierno federal de una comisión de la verdad para los desaparecidos y asesinados del pueblo purépecha, “toda vez que no puede existir un plan de justicia purépecha si precisamente no hay verdad ni justicia para quienes lucharon por sus pueblos”.
Agregó que ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se encuentran pendiente la resolución del dictamen de fondo en el caso de la familia Guzmán Cruz.
Esta crisis de personas desaparecidas y asesinadas, especialmente por su participación en la lucha social y política, exige de las autoridades una intervención inmediata para dar justicia y certidumbre a los familiares de las víctimas, resolver los casos y prevenir futuras desapariciones.
Guzmán Macario aseguró que, en caso de no obtener una respuesta pronta y favorable a las demandas de las comunidades originarias de Michoacán en esta materia, se tendrán movilizaciones, cuya naturaleza y alcance reservó por el momento.
Este miércoles se conmemoran 51 años de la desaparición forzada de José de Jesús Guzmán y cinco de sus hijos por parte del Ejército Mexicano y la entonces Dirección Federal de Seguridad, como parte de la denominada guerra sucia, emprendida desde el gobierno federal contra los movimientos sociales y sus opositores políticos.
Esta acción además implicó la detención de un sexto hermano de la familia, Alexander, quien enfrentó daños irreversibles, y una lucha por la búsqueda de sus familiares emprendida por María Salud Cruz Jiménez, misma que actualmente se ha vuelto generacional.
Para recordar la permanencia del caso de la familia Guzmán Cruz, este miércoles, en el CCC, se lleva a cabo un acto conmemorativo, artístico y político, con la instalación de una intervención con los rostros de desaparecidos y copias de fichas de búsqueda dispersas.