SPUM y SUEUM se unen en una marcha en Morelia contra la reforma nicolaita, defendiendo sus derechos laborales.
Morelia, Michoacán.- La que parecía ser una lucha perdida tomó un rumbo distinto y en unidad, el SPUM y SUEUM continúan la ruta contra la reforma nicolaita que se perpetró en el Congreso del Estado la madrugada del pasado 8 de marzo.
Las acciones de los sindicatos titulares de los Contratos Colectivos de Trabajo (CCT) de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), convocaron a una marcha que encabezarán juntos.
Será el próximo jueves 27 de marzo cuando el Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana y el de Empleados de la Universidad Michoacana, se concentren en el Centro Histórico de Morelia para arrancar con la marcha que llegará hasta las oficinas del Poder Judicial de la Federación.
Ahí, se espera que los abogados y/o representantes de los sindicatos, presenten un amparo individual contra la nueva Ley Orgánica de la Universidad Michoacana, al considerarla violatoria de sus derechos laborales y además, irregular en su proceso de construcción.
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Antecedentes de la legislación nicolaita
La nueva Ley Orgánica de la Universidad Michoacana se empezó a construir desde mayo de 2024, cuando -contrario a los lineamientos en ese entonces vigentes- se reformó el Estatuto universitario; desde ahí, se establecieron puntos que posteriormente ya solo se armonizaron en la Ley Orgánica.
Ejemplo de ello, fue el tema del Tribunal Universitario y la elección del nuevo rector o rectora, que, desde la reforma al Estatuto, se determinó y aprobó por el Consejo Universitario, pese a no estar plasmado en la Ley Orgánica entonces vigente.
Ese, ha sido un tema de discusión entre la comunidad universitaria, sobretodo de quienes desde el inicio, se manifestaron no en contra de la reforma, pero sí del proceso que consideraron incluso, ilegal y alejado de la discusión nicolaita.
Posteriormente, en noviembre de 2024 se hizo lo propio con la reforma al artículo 143 de la Constitución Política de Michoacán, donde también se planteó la “democratización” en la elección del rector. Y ahí, ya se discutió la actualización del sistema de Jubilaciones y Pensiones.
Con esos dos antecedentes, se otorgó a los integrantes del Consejo Universitario un proyecto de reforma, se organizaron tres foros digitales en los que no participaron más de 270 personas -por foro- en los que se discutieron cuatro puntos torales de la reforma y se hizo un compromiso para recoger todas las inquietudes de los exponentes (a favor y en contra).
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Consejo Universitario aprueba la reforma nicolaita
Sin embargo, sin mayores cambios al proyecto inicial de reforma, el documento final fue aprobado por el Consejo Universitario, sin dar oportunidad a la comunidad nicolaita de conocer cómo fue que se pusieron sobre la mesa las inquietudes de quienes participaron en los foros digitales.
Se observó un cambio entre un documento y otro, se trató de la Comisión de Rectoría, que en el proyecto inicial no se desaparecía, únicamente crecía en número de integrantes para pasar de 8 a 11, para incluir a tres mujeres: maestra decana, directora decana y alumna consejera con el mayor promedio académico.
En el documento final y tras un conflicto entre la rectora Yarabí Ávila González y el presidente de la Comisión de Rectoría, se modificó el artículo para entonces, desaparecer al órgano de gobierno de la Universidad Michoacana y sustituirlo por una comisión electora, que estará integrada por 9 personas.
Finalmente durante la madrugada del 8 de marzo, la Ley Orgánica fue aprobada por mayoría en el pleno legislativo, con el voto en contra de un diputado y un intento de “portazo” que encabezaron trabajadores académicos y administrativos de la Universidad Michoacana.
