Hoy, gracias a plataformas y catálogos especializados, es posible explorar una gran variedad de títulos que encajan en este género híbrido

Redacción / La Voz de Michoacán

Las series de acción siempre han ocupado un lugar especial dentro de la televisión, porque condensan adrenalina, combates espectaculares y un ritmo narrativo que mantiene a la audiencia al borde del asiento. Cuando además se suman las artes marciales, el género alcanza una intensidad que combina espectáculo físico con tradición cultural.

El atractivo de estas radica en que no se limitan a mostrar golpes o coreografías, sino que muchas veces integran filosofías orientales, lecciones de disciplina y relatos de superación personal. Los espectadores no solo disfrutan de las batallas en pantalla, también conectan con los valores que transmiten los personajes.

Hoy, gracias a plataformas y catálogos especializados, es posible explorar una gran variedad de títulos que encajan en este género híbrido. Un ejemplo es, donde se pueden descubrir producciones que van desde clásicos modernos hasta estrenos recientes que revitalizan la acción con artes marciales.

Además, la clasificación de series por género ha permitido a los fanáticos encontrar con mayor facilidad las propuestas que buscan. Al agrupar la ficción televisiva según sus temáticas centrales, se abre un panorama más claro sobre la amplitud del medio y su capacidad de diversificarse.

Por eso, al hablar de , resulta evidente que las de acción con artes marciales ocupan un lugar privilegiado. A continuación repasaremos cinco títulos esenciales que marcaron un antes y un después en este terreno, ya sea por su impacto cultural, por la espectacularidad de sus coreografías o por la forma en que revitalizaron el gusto del público por las artes marciales en la pantalla chica.

Into the Badlands (2015–2019)

Into the Badlands es quizá la serie que mejor representa la fusión entre artes marciales y narrativa televisiva contemporánea. Estrenada en 2015, combina un mundo posapocalíptico con un sistema de clanes dominado por guerreros expertos en combate cuerpo a cuerpo.

La historia sigue a Sunny, interpretado por Daniel Wu, un letal guerrero que intenta escapar del violento sistema feudal que lo atrapa. Lo que distingue a esta serie son sus coreografías espectaculares, filmadas con un cuidado visual que remite al cine de Hong Kong.

Cada pelea funciona como un pequeño ballet de violencia estilizada, donde la cámara acompaña con precisión los movimientos. La serie, además, introduce reflexiones sobre el poder, la libertad y la redención, demostrando que el género puede ser filosófico sin perder espectacularidad.

Warrior (2019–2023)

Inspirada en los escritos de Bruce Lee, Warrior recupera la esencia del kung-fu en televisión. Ambientada en el San Francisco del siglo XIX, la serie se adentra en las guerras de Chinatown, mostrando cómo los inmigrantes chinos sobrevivían en un contexto hostil de discriminación y violencia.

El protagonista, Ah Sahm, llega desde China en busca de su hermana, y rápidamente se ve envuelto en las luchas de poder entre pandillas y autoridades corruptas. Lo que diferencia a Warrior es su autenticidad histórica combinada con la intensidad de las escenas de combate.

La producción, apoyada por la familia Lee, rinde homenaje al legado del maestro de las artes marciales, pero también reflexiona sobre el racismo, la identidad y la supervivencia en un mundo desigual. Su mezcla de acción trepidante y trasfondo social la convierten en una de las joyas recientes del género.

Daredevil (2015–2018)

Dentro del universo de Marvel, Daredevil destacó no solo por su tono oscuro y realista, sino también por las secuencias de combate que redefinieron los estándares de la televisión de superhéroes. Protagonizada por Charlie Cox como Matt Murdock, un abogado ciego que combate el crimen en Hell’s Kitchen, la serie se convirtió en referencia obligada.

La famosa pelea en el pasillo de la primera temporada, filmada en un solo plano secuencia, es considerada una de las mejores escenas de acción televisiva. Más allá de la espectacularidad, lo que transmite es el esfuerzo físico realista: los personajes se cansan, sangran y siguen luchando.

El uso de artes marciales en la narrativa subraya el contraste entre el héroe y sus enemigos, y aporta verosimilitud a un relato que, pese a sus raíces en el cómic, se siente profundamente humano. Daredevil demostró que la acción televisiva podía alcanzar niveles cinematográficos.

Wu Assassins (2019)

Estrenada en Netflix, Wu Assassins combina artes marciales con elementos de fantasía sobrenatural. La serie está protagonizada por Iko Uwais, actor indonesio conocido por su papel en The Raid, lo que garantiza autenticidad en cada coreografía.

La historia sigue a Kai Jin, un chef de Chinatown que se convierte en el último Wu Assassin, elegido para luchar contra criminales que poseen poderes ancestrales. Aunque su trama es fantástica, lo que realmente la distingue son sus escenas de combate, rodadas con precisión y realismo gracias a la experiencia de Uwais.

Con solo una temporada y una película complementaria (Fistful of Vengeance), Wu Assassins se consolidó como un título atractivo para quienes buscan la intensidad de las artes marciales en un formato moderno y accesible.

Cobra Kai (2018–presente)

Lo que comenzó como un proyecto nostálgico se transformó en un fenómeno global. Cobra Kai, secuela de la clásica saga Karate Kid, retomó la rivalidad entre Daniel LaRusso (Ralph Macchio) y Johnny Lawrence (William Zabka) décadas después de la película original.

La serie logró equilibrar el homenaje al pasado con un guion fresco que explora nuevas generaciones de karatecas. Sus combates, aunque enmarcados en un tono juvenil, mantienen un nivel de intensidad que sorprende, especialmente en las coreografías de torneos y peleas grupales.

Más allá de la acción, Cobra Kai aborda temas como la redención, la amistad, la competencia y la transmisión de valores. Su éxito global demuestra que las artes marciales siguen siendo una fórmula vigente y adaptable a distintos públicos.

Las artes marciales siempre han tenido un encanto especial porque no solo son espectáculo físico: también transmiten valores culturales, espirituales y filosóficos. En la televisión, estas historias funcionan como un puente entre Oriente y Occidente, acercando al público global a tradiciones que hablan de disciplina, honor y equilibrio.

A diferencia del cine, donde suelen brillar producciones aisladas, en las series televisivas las artes marciales se desarrollan con mayor profundidad. Esto permite explorar tanto la evolución de los personajes como las implicancias emocionales de cada enfrentamiento.

La popularidad actual del género se debe también al streaming, que abrió las puertas a producciones más arriesgadas y a una audiencia global dispuesta a consumir historias intensas y culturalmente diversas.

Un género en constante movimiento

Las series de acción con artes marciales no solo entretienen: inspiran, enseñan y conectan con un imaginario que combina fuerza física y crecimiento interior. Desde el universo posapocalíptico de Into the Badlands hasta la nostalgia contemporánea de Cobra Kai, cada producción ofrece una forma distinta de entender la lucha y el esfuerzo.

Su vigencia demuestra que este es un género en constante evolución, capaz de adaptarse a nuevas plataformas y a públicos diversos. Para los fanáticos, cada título es una oportunidad de redescubrir lo que hace únicas a estas historias: la combinación de disciplina, filosofía y espectáculo.

Explorar este tipo de propuestas es abrir la puerta a relatos que no solo muestran combates espectaculares, sino que también transmiten mensajes sobre la vida, la superación y el valor de nunca rendirse.