La preservación de los maíces nativos de Pátzcuaro está amenazada por el cambio generacional y la falta de rentabilidad en la agricultura de acuerdo a investigadores de la UNAM campus Morelia.
Morelia, Michoacán.- La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a través del Centro de Investigaciones en Geografía Ambiental (CIGA), ubicado en el Campus Morelia, investiga sobre la posible desaparición de las más de cinco razas de maíces nativos que se cultivan en la rivera de lago de Pátzcuaro debido, principalmente, al relevo generacional.
A decir de los especialistas del CIGA, las nuevas generaciones no ven en la agricultura un modo de vida que sustente a sus familias en el futuro por lo que deciden cambiar de oficio o salir de sus comunidades en búsqueda de una mejor condición de vida, lo que pone en riesgo la permanencia de los cultivos autóctonos de la región a largo plazo.
En este sentido, la investigadora del CIGA, doctora Marta Astier Calderón, explicó que varios cultivos de granos autóctonos se mantienen por los huertos de traspatio que suelen tener algunas familias donde persiste la cultura de la producción de alimentos para consumo familiar “prefieren su propio maíz, su propio frijol, comer unos buenos quelites, pero no es rentable para nada”, dijo.
“Hasta hace 15 años, Michoacán se ostentaba como uno de los cinco estados con mayor diversidad de semillas, al concentrar el 10 por ciento de las razas de maíz que existen en el país, y actualmente, de acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural el estado es uno de los cinco productores de maíz a nivel nacional junto con Sinaloa, Jalisco, Estado de México y Guanajuato.”
Investigadora del CIGA, doctora Marta Astier Calderón
Sin embargo, no todos los granos son cien por ciento comerciales o rentables, debido a que los cultivos industrializados y/o tecnificados han desplazado poco a poco a los maíces nativos, reemplazándolos por criollos lo que hace que esto se vuelva una competencia para los pequeños agricultores quienes le apuestan más por el autoconsumo y con ello, la permanencia de los granos nativos de la cuenca de Pátzcuaro.
“Si está en riesgo si estamos preocupados porque estamos hablando de diez a 20 años” refirió, en los que estos granos nativos podrían ser desplazados por otros o por el abandono de las tierras de agricultura y con ello, la pérdida de la tradición por el cultivo de las tierras familiares.
Ante esto, la especialista del CIGA indicó que existen iniciativas encaminadas al rescate de estos granos, mismas que trabajan desde el Centro de Investigación de la UNAM, de la mano con las instancias gubernamentales correspondientes tanto a nivel estatal como nacional para que los cultivos de granos autóctonos no sean desplazados y así se mantengan los granos nativos de Pátzcuaro.
Acerca del CIGA
Dentro de sus áreas de investigación del Centro de Investigaciones en Geografía Ambiental (CIGA) UNAM Campus Morelia destacan el estudio de los ambientes rurales, que se caracterizan por la predominancia de comunidades campesinas, donde destaca la existencia conjunta de espacios seminaturales y espacios transformados principalmente por actividades primarias (minería, pesca, agricultura, ganadería y silvicultura) bajo diferentes tipos, niveles y escalas de explotación.
Los ambientes rurales también están condicionados por factores externos, en particular por implicaciones ambientales a niveles regional y local producto de los patrones de cambio globales (climático, económico, demográfico, cultural, entre otros) los cuales inciden en la transformación de territorios específicos a través del tiempo.
El CIGA se distingue, en el contexto local y nacional por las cinco líneas de investigación que desarrolla:
- Planificación ecológica y territorial
- Sistemas de manejo de los recursos del territorio
- Servicios ambientales y gobernanza
- Cambio de uso y cubierta del suelo
- Riesgo ambiental