En campaña, Araceli Saucedo convocó a las y los candidatos del PRD, PAN y PRI, así como a las y los michoacanos, a no caer en provocaciones en estos diez días que nos separan de la jornada electoral, a continuar como hasta ahora, con altura de miras consolidando este proyecto que es de todas y todos.

En este proyecto mantendremos una campaña de altura, porque sabemos que el dos de junio ¡el triunfo es nuestro!, y que las y los michoacanos han decidido empujar con toda determinación esta ruta que hemos construido de forma unida, recalcó Araceli Saucedo Reyes, candidata al Senado de la República por la Coalición Fuerza y Corazón por México.

Araceli Saucedo convocó a las y los candidatos del PRD, PAN y PRI, así como a las y los michoacanos, a no caer en provocaciones en estos diez días que nos separan de la jornada electoral, a continuar como hasta ahora, con altura de miras consolidando este proyecto que es de todas y todos, y que permitirá el rescate de Michoacán y México.

“A lo largo de esta campaña hemos asumido la importancia de dejar atrás la polarización y el encono al que han pretendido llevar a nuestro país y estado, porque tenemos claridad de que unidos, sin exclusiones, denostaciones, guerra sucia y odio, es como podremos salir adelante.

Esa es nuestra convicción, así nos mantendremos hasta el dos de junio en que los votos nos otorguen el triunfo, y así actuaremos en el ejercicio de la responsabilidad pública que tendremos tras la victoria”.

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La candidata apuntó que la serenidad y la cabeza fría son fundamentales en esta recta final para quienes con el respaldo de las y los michoacanos encabezan con este proyecto las preferencias electorales, y recordó que su determinación está por una contienda sana y de altura, con una crítica puntual de aquello que no ha funcionado en el país y estado, y con un ánimo propositivo que tiene como respaldo una ruta de trabajo construida con miles de mujeres y hombres en Michoacán y México.

“La desesperación no está en nosotros, tampoco la denostación del contrario ni la guerra sucia, porque México y Michoacán están exigiendo que la tarea política sea de altura, atendiendo el interés superior de la nación y el estado, y bajo esa convicción es que nos hemos conducido, porque sabemos que hoy lo que está en juego son los derechos, el desarrollo, la estabilidad y la paz en nuestro país”.