Morelia, Michoacán
No habrá contratación de deuda a largo plazo por el gobierno estatal en 2026 ni se prevé tampoco en el resto de este sexenio, adelantó el secretario de Finanzas y Administración, Luis Navarro.
En entrevista, el funcionario estatal explicó que aunque él no está en contra de este recurso, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla sí lo está:
“El gobernador está en conta 100 por ciento de lo créditos. Yo en lo personal no. Yo creo que un crédito, si lo aplicas bien, como lo podemos aplicar para un coche, para una inversión, no debe de ser un riesgo o un problema. El probema es que tráiamos la mala experiencia de que no se utilizaba para lo que se solicitaba”, indicó.
Luis Navarro explicó que el gobierno estatal enfrenta varias dificultades, puesto que además de que se está invirtiendo en obra pública con recursos propios como no se había hecho antes, se arrastran algunas demandas de proveedores a los que no se les pagó en administraciones anteriores que han llevado al pago de 12 millones de pesos hasta ahora.
“Ya no da para más, ya lo que traemos está comprometido el recurso, así se dijo, de los años subsecuentes, entonces el recurso del 26 y 27 será para dejar pagada perfectamente toda la obra que se hizo, que se contrató y que se debe de dejar terminada al 100 por ciento”, declaró el secretario de Finanzas.
Descartó que el presupuesto federal para el 2026 vaya a venir con una disminución, aunque si el incremento es menor a la inflación, habría problemas. Precisó que no es que venga de origen a la baja, sino que el Gobierno de Michoacán elabora su presupuesto a partir de la cifra que se da a conocer en un principio, pero que una vez que se publica en el Diario Oficial de la Federación, se aplican ajustes y se reduce. Para el 2025, esto implicó 800 millones de pesos menos.
En este caso, indicó Luis Navarro, corresponde hacer ajustes o buscar que a través del Sistema de Administración Tributaria estatal se impementen medidas de recaudación.
Acotó que si bien no habrá deuda a largo plazo, la deuda a corto plazo se ha venido empleando a lo largo de toda la administración, pues equivale a tener una tarjeta de crédito “que si la usas bien no tienes broncas”, pues se ha estado aplicando un monto mucho menor al tope que establece la ley, de dos mil millones en promedio.
“Hemos solicitado un promedio de dos mil millones de pesos cada año. Antes se iban al tope, la ley dice que pudes sacar en corto lazo el seis por ciento de tu presupuesto. Yo podría tener seis mil millones al año, pero el primer año fueron dos mil 400”, detalló.