MICHOACÁN | LOS NEGRITOS EN EL PODER JUDICIAL
Más allá de las discrepancias en torno a uno de los requisitos para ser candidatas o candidatos a ministros, magistrados o jueces, vale la pena dar a conocer quienes no poseen un promedio mínimo de 8 de calificación en sus estudios, tal como lo establece el marco jurídico federal.
Aunque, en el caso de Michoacán, en esta ocasión nos estaremos dirigiendo solamente a cuatro candidatos que ganaron las elecciones para magistrados el pasado domingo primero de junio, en un atrabancado y perverso proceso para renovar el poder judicial del estado. Veamos:
- JOSE ALFREDO FLORES ganó la elección como Magistrado del Tribunal de Disciplina Judicial en el Estado, acompaña constancia de licenciatura únicamente y tiene una calificación general de 7.8.
- MARIO SOTELO RODRIGUEZ ganó la elección como Magistrado Penal, tiene calificación general en la licenciatura de 7.21. En su memorándum de calificaciones se advierte que en las materias relacionadas con el cargo que se postula cuenta con calificaciones de 6 en derecho penal primer grado, 7 en derecho procesal penal en segundo grado, 7 en derecho penal cuarto grado, 6 en Penal en cuarto grado, 6 en Amparo quinto grado.
- ENOCK BARRAGAN, ganó la elección como Magistrado Civil, tiene una calificación general de 7.17.
- JAVIER CERVANTES MARTINEZ, ganó la elección como Magistrado Civil promedio general de 7.82.
CONTEXTO
El Artículo 97, fracción II, Constitución Federal señala entre los requisitos para ser magistrado, lo siguiente:
“Contar el día de la publicación de la convocatoria señalada en la fracción I del artículo 96 de esta Constitución con título de licenciatura en derecho expedido legalmente y haber obtenido un promedio general de calificación de cuando menos ocho puntos o su equivalente y de nueve puntos o equivalente en las materias relacionadas con el cargo al que se postula en la licenciatura, especialidad, maestría o doctorado. Para el caso de Magistrada y Magistrado de Circuito deberá contar además con práctica profesional de al menos tres años en un área jurídica afín a su candidatura.”
Es decir, la reforma federal plantea que los aspirantes deben tener promedio general de 8 en la licenciatura Y de nueve o equivalente en las materias relacionadas con el cargo.
Por su parte, el Artículo 76, fracción III, de la Constitución Local Michoacán dice:
“Poseer al día de la convocatoria señalada en la fracción I del artículo 69 de esta Constitución, título profesional de licenciado en derecho, expedido por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo o por autoridad o institución legalmente facultada para ello, un promedio general de calificación de cuando menos ocho puntos o su equivalente, y/o de nueve puntos o su equivalente en las materias relacionadas con el cargo que se postula en la licenciatura, especialidad, maestría y doctorado, y práctica profesional de cuando menos tres años en el ejercicio de la actividad jurídica.”
Es decir, la Constitución de Michoacán, en vez de replicar la esencia de los requisitos planteados desde la reforma judicial federal, agrego una “o” para que no se limite a un promedio general de 8 en licenciatura, si no que, con el “y/o” se abra la posibilidad de que personas con nivel de calificación de 6 o 7 puedan obtener la idoneidad, lo que totalmente contrario a la reforma constitucional. Esta es la razón por la que, se ha permitido el registro de personas con promedio menor a 8. Primero que en la Constitución de Michoacán se manipuló el requisito para saltarse la exigencia de la reforma federal y segundo, que de manera “legal”, hay Magistrados electos que en lo local si cumplen con los requisitos, pero en lo federal no. Hay que decir, que tanto el INE como la Sala Superior han exigido el cumplimiento del requisito del promedio, tan es así que en su momento el INE no declaró la validez de 35 candidatos nacionales que no cumplieron con el promedio, pero esa regla no aplica en Michoacán, por virtud de la manipulación ya descrita en la constitución local.
CANTERA
Desde el punto de vista legal no todo está perdido para el ex gobernador Silvano Aureoles Conejo, acusado de presunto desvío de recursos en la construcción de cuarteles policiaco, pero, para ello, se requiere presentarse ante la justicia. Lo inaudito es la incapacidad de las autoridades nacionales e internacionales para lograr su captura.
CANTERITA
Toc, toc… Cada día pasa el tic tac escala con mayor tono para el fiscal general de Michoacán, Carlos Torres Piña, para demostrar con acciones el porqué está ahí, por lo pronto, una buena decisión hacer a un lado los retenes carreteros; sería una estupidez reconocer y/o decir que fue obligado, políticamente hablando.
GOTEO
¡Cuidado!, sobre todo aquellos que crean sin argumentar del todo que Raúl Zepeda Villaseñor no tiene el perfil para ejercer el cargo de la titularidad política interna del territorio michoacano, así dijeron de Yankel Benítez Silva, secretario del Ayuntamiento de Morelia…