La Feria del Mezcal en Queréndaro se celebrará el 21 y 22 de diciembre, con operativos de seguridad que garantizan la tranquilidad de todos
Morelia, Michoacán.- “Los protocolos y operativos que se han implementado garantizan la seguridad de turistas, de visitantes y por supuesto de los habitantes de Queréndaro”, así lo aseguró Diana Caballero, presidenta municipal de esa demarcación que hace unos días estuvo en medio de un conflicto entre supuestos grupos del crimen organizado.
Al anunciar la Feria del Mezcal en que se desarrollará el 21 y 22 de diciembre, Diana Caballero Romero, precisó que los operativos de seguridad que se instalaron en ese municipio han dado resultados positivos y a la fecha, no se han reportado más episodios violentos, aunado a que junto con los habitantes se trabaja para restablecer la cotidianidad.
Caballero Romero, detalló que tras los hechos violentos, el Estado y la Federación han instalado distintos operativos intermunicipales y de coordinación de seguridad, por lo que se han realizado distintas actividades para incentivar la economía y atraer al turista, mismas que aseguró, se han desarrollado sin incidentes:
“Tuvimos el fin de semana pasada la Feria del Taco y nuestra Villa Navideña, vivimos con mucho gusto una derrama económica importante para los taqueros; hay un protocolo de seguridad y entendemos que las autoridades están actuando en la materia”.
La alcaldesa, confirmó que se han realizado distintos cambios dentro de la corporación policiaca de Queréndaro y que las investigaciones y aseguramientos continúan, así como los protocolos necesarios para garantizar la seguridad de sus habitantes.
“Nosotros también nos hemos apegado a los protocolos que nos han dictado de resguardo para el municipio y para que se sientan a gusto nuestros habitantes y turistas con los festivales y ferias que organizamos. Nosotros siempre vamos buscar que prevalezca la paz”.
Para contexto de nuestros lectores, los pasados 5 y 15 de noviembre en los municipios de Zinapécuaro y Queréndaro, se como balaceras, quema de vehículos en entradas y salidas en ambas demarcaciones, así como la muerte de un elemento de seguridad de Queréndaro y disparos en el Palacio Municipal de Zinapécuaro.