Morelia, Michoacán
La situación de la huelga en ArcelorMittal, la empresa más grande de Michoacán, se encuentra en un punto crítico. Un tribunal colegiado de jueces será el encargado de determinar la legalidad de la huelga que mantiene paralizadas las operaciones de la planta en la que laboran ocho mil personas.
En conferencia de prensa, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla abordó el tema y explicó que el conflicto surgió a raíz del reparto de utilidades correspondiente al año anterior. Mientras la empresa reportó ganancias menores al Servicio de Administración Tributaria (SAT), el sindicato minero sostiene que las cifras reales son superiores y, por lo tanto, demandan un reparto de utilidades más elevado. A pesar de las negociaciones y el diálogo, no se ha logrado un acuerdo, y una nueva reunión se llevará a cabo próximamente en la Ciudad de México.
“ArcelorMittal es vital para todo un encadenamiento productivo, incluyendo la industria automotriz y de electrodomésticos. Ojalá que pronto trabajadores, sindicato y empresa logren un acuerdo para reactivar el alto horno”, comentó el mandatario estatal.
Ramírez Bedolla añadió que la huelga que casi lleva un mes, ha generado pérdidas significativas. “Reactivar el alto horno no es un proceso inmediato y podría tomar varios días. Además, los trabajadores exigen el pago de salarios caídos durante el periodo de huelga, complicando aún más la situación”, refirió.