Morelia, Michoacán, 06 de septiembre de 2024.- La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) es una institución gubernamental de México encargada de proteger los derechos de los consumidores.
Con este objetivo, utiliza sus redes sociales para alertar sobre alimentos disponibles en los grandes supermercados del país que no cumplen con los estándares establecidos en sus etiquetas.
En esta ocasión, decidió destacar ciertos aceites de cocina, frecuentemente elegidos por las familias, que no deberían ser consumidos ni comprados.
Los aceites de cocina que debes evitar comprar según la Profeco
En un reciente estudio publicado en la Revista del Consumidor, Profeco examinó 32 productos de aceite vegetal y reveló que ocho marcas están adulteradas. A continuación, se detallan los aceites que no cumplen con los estándares de pureza y calidad:
- Kum Chum, aceite de ajonjolí prensado en frío de 248 ml.
- Foreway Sesame Expert, aceite de ajonjolí de 185 ml.
- Kaporo, aceite de ajonjolí blend de 190 ml.
- San Lucas, aceite de aguacate extra virgen gourmet de 500 ml.
- San Lucas, aceite de pepita de uva de 500 ml.
- Cate de mi corazón, aceite de aguacate de 250 ml y 500 ml.
- Cate de mi corazón, aceite de aguacate mediterráneo de 250 ml.
- Avocare, aceite de aguacate 100% de origen natural de 250 ml.
El estudio de Profeco sugiere que estos aceites de cocina podrían ser perjudiciales para la salud a largo plazo, ya que no son puros y contienen mezclas que afectan su calidad.
Además, identificó que dos productos no cumplen con las declaraciones de contenido en sus etiquetas:
- La cocina verde, aceite de ajonjolí orgánico de 520 ml.
- Satoru, aceite de ajonjolí de 275 ml.
¿Cuál es el mejor aceite para el consumo humano?
El aceite de oliva, especialmente en su forma extra virgen, es ampliamente reconocido como uno de los aceites más beneficiosos para la salud humana.
Su reputación como el «rey de los aceites» se debe a su perfil nutricional excepcionalmente saludable, que incluye un alto contenido de grasas monoinsaturadas, antioxidantes y compuestos antiinflamatorios.
El aceite de oliva virgen extra es particularmente rico en ácidos grasos monoinsaturados, como el ácido oleico, que juega un papel crucial en la mejora del perfil lipídico en la sangre.
Este tipo de grasa ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL, conocido como colesterol «malo«, mientras que aumenta el colesterol HDL, el colesterol «bueno«.
Además, es una fuente excelente de polifenoles, que son potentes antioxidantes. Estos compuestos protegen las células del daño oxidativo causado por los radicales libres, lo que puede tener un impacto positivo en la prevención de enfermedades crónicas.
Otro aspecto destacado es su potencial antiinflamatorio. Diferentes estudios han demostrado que los compuestos presentes en el aceite de oliva pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo.
Finalmente, hay evidencia emergente que sugiere que el aceite de oliva también podría tener beneficios para la salud cerebral. Los compuestos en el aceite de oliva podrían ayudar a mejorar la memoria y ofrecer protección contra el deterioro cognitivo asociado con el envejecimiento. (CON INFORMACIÓN DE: EL CRONISTA)